Sunday, November 11, 2007


Te perdí creyendo extinta la ilusión que nos unía
y así arrojé al olvido sin lágrimas caídas
cada tarde del verano en que en tus brazos yo sentía
que nada en este mundo era capaz de derrumbarnos.

Mas lamento despedir así la magia de esos días
y hoy extrañar tu luz aunque suene una ironía
pues deseo tanto revivir la sombra de tu compañía
para sentirme nuevamente más inmensa que nunca.

Pues solo junto a tí el cielo alcanzar sentía
cuando tus labios en mis labios eran la dulce melodía
que bajo las estrellas me dio fuerzas para enfrentar cada vacío
y no defraudar a aquel ángel que siempre me protegía.

Pero ya es demasiado tarde para regresar los días
pues ante mi estupidez, cupido se dio por vencido
y aunque hoy me aferre al recuerdo de lo que existía
se que inevitablemente ya no somos un solo latido.